domingo, 15 de abril de 2007

Privacidad acústica

tele trabajo
Leyendo Lifehack he descubierto un novedoso sistema para conseguir privacidad acústica. Lifehack se trata de un blog dedicado a la productividad y a lo que llaman GTD. Me interesó bastante un artículo titulado Cinco problemas comunes del trabajo en casa, ya que trabajo en casa. Los cinco problemas son los siguientes:
  • Lo siento, pero está cerrado. Explica la importancia de delimitar tanto física como mentalmente el espacio y el tiempo de trabajo.
  • ¿Como? ¡No te oigo! Si en nuestro trabajo tenemos que tratar con clientes por teléfono se hace necesario un ambiente libre de ruidos.
  • Haz sagrado tu lugar de trabajo. Explica maneras de que tu lugar de trabajo sea inviolable.
  • Entrega especial. Habla de los casos en los que tengas que recibir paquetes.
  • Déjate entrar. Puede que tengas que permitir el acceso a tu casa a empleados.
En lo referente a los ruidos, explican que hay que evitar que ruidos no profesionales, tales como perros ladrando o niños llorando, interfieran en tu capacidad para escuchar o ser escuchado. Por otro lado, si estás discutiendo asuntos sensibles, quizás no quieras que alguien en casa escuche tus conversaciones. La solución que proponen me resultó de lo más geek: emplear un generador de ruido blanco.

El ruido blanco se caracteriza por contener todas las frecuencias con la misma potencia, del mismo modo que el color blanco contiene todas las frecuencias del espectro luminoso. De ahí el nombre.

Por lo visto, estos generadores de ruido blanco se pueden emplear para enmascarar todo tipo de ruidos, tales como ladridos de perros, televisión, golpes de puertas, ruido de tráfico.

En la anotación hacían referencia a una empresa, Speech Privacy Systems, que se dedica a diseñar estos sistemas, tanto para privacidad de conversaciones en oficinas, como sets de viaje y hogar.

Dicen que suena como un aparato de aire acondicionado de gama alta. Por otro lado, como el sonido es absolutamente constante, pero sin una estructura, el cerebro acaba por dejar de escucharlo. Como el sonido del ventilador de tu ordenador (bueno, el tuyo no Yeray, que incluso se escucha en el Skype), que después de un rato lo sigues escuchando pero no lo notas.

Algunos de estos sistemas comerciales incluso añaden sonidos de la naturaleza, tales como lluvia, para conseguir un ambiente agradable para dormir, leer, etc.

Etiquetas: ,